martes, 5 de mayo de 2009

COMENTARIOS DE REFLEXIÓN

LAS MODIFICACIONES AL CÓDIGO DE LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES

Comentarios: Alejandro Cussianovich

Algunas Consideraciones Previas

Una primera es reconocer que todo texto jurídico, toda forma de verbalizar o de consignar por escrito un derecho, una obligación, una medida a observarse, por ser un hecho cultural, un acto humano, puede conocer mejores formas de decirlo, de expresarlo; puede además precisarse, reducir el margen de imprecisión al que haya podido dar lugar. En este sentido, revisar un documento como el Código de los Niños y Adolescentes, es un acto rutinario, necesario y saludable para el buen entendimiento en la sociedad.

Una segunda es concentrarnos en el espíritu de la norma que se quiere modificar para ver cuál es el sentido y cuáles las eventuales implicaciones de dichos cambios.Toda modificación puede o bien ser un hecho que refuerza el bien social y jurídico que está en juego, o bien desvirtuarlo, en cuyo caso se trata de una modificación de retroceso, de empobrecimiento, de merma de la fuerza que tenía el texto no modificado.
Una tercera es que no estamos sólo en un nivel de limpieza del lenguaje. Estamos intentando ser más fieles al fondo de la norma, a aquello que le da sentido y significación social, a aquello que la constituye un factor de humanización.

Una cuarta refiere a que -como es el caso de las modificaciones al CNA- los propios sujetos de dichas normas, deben ser los más interesados en que las modificaciones apunten a favorecer al bienestar de cada Niño, Niña, a asegurar un mejor desempeño como ciudadanos y ciudadanas.

Una quinta es exigir que no sólo se escuche las propuestas de modificación, de inclusión, sino que dichas propuestas de modificación sean tomadas en cuenta por quienes deban luego tomar las decisiones.

Una sexta nos alerta sobre la necesidad de que las organizaciones de niños, niñas y adolescentes hagan pública su participación en el proceso de levantamiento de propuestas y ubiquen los canales institucionales que hagan que su aporte no sea relegado al rubro de aportes meramente simbólicos y decorativos.

Una séptima es recordar que desde que en 1990 se ratificó la Convención sobre los derechos del Niño, el proceso de elaboración del nuevo Código pasó por una serie de intentos. El primero lo constituyó la comisión creada por el Congreso o Parlamento y estaba presidida por el Dr. Fermín Chunga La Monja. El segundo intento fue el que promoviera el Ministerio de Justicia. Esta comisión tuvo como secretaria ejecutiva a la Dra. Ana María Vidal y un equipo de profesionales altamente calificados. Para el 28 de diciembre de 1992, el nuevo Código fue aprobado por el Ejecutivo de entonces. El actual proceso de modificación es el cuarto en la historia del CNA. Pero esta historia es la historia de tensiones, de distintos enfoques, de desencuentros entre predominantes culturas de infancia y el rol de la familia, de la sociedad, del Estado y sus organismos; entre las nuevas organizaciones de niños, en particular niños y niñas trabajadores y posiciones de algunos sectores del país representados por algunas ONGs o por organismos internacionales. Hoy como ayer, el escenario es igualmente de tensiones, pero además, en este último tramo, el Perú ha signado documentos a nivel internacional que refieren a la infancia y ello es parte de los escenarios en los que toca acometer las modificiones que puedan venir de los distintos frentes de interés. Pero también los niños, niñas y adolescentes del Perú han avanzado significativamente en el conocimiento, exigencia y defensa de sus derechos. Bastaría mencionar la experiencia de Municipios Escolares, La Red Nacional de NNA por sus derechos.

Tres sugerencias Concretas

1.- A los niños y niñas les asiste el Derecho a Participar en todo lo que les afecta o vaya a tener gravitación en sus vidas. La Convención es clara - aunque sin desprenderse de viejas visiones de infancia respecto a las condiciones de sus participación como lo recuerda A. Baratta- en el Artículo 12, derecho que se recoge en el CNA. Por ello, no es una mera concesión de buena voluntad a la que debe estar librada la responsabilidad de opinar, de proponer por parte de los niños, cómo quieren el Código que normará la vida de sus pares en los próximos años. La institucionalización de este derecho a nivel general, es muy deficiente y arbitraria. Quiza sea a nivel regional y de gobierno local que los propios niños hagan valer el ejercicio de su derecho a ser coproductores de normativa.

2.- Pero participar en la elaboración de la normativa, puede aparecer como algo engorroso e interminable para quienes tienen la tarea de legislar en el sistema democrático. Sin lugar a dudas hay mucho de cierto en esta objeción. Toca a los niños, niñas y adolescentes, en especial a los organizados, hacer una labor de sensibilización de sus pares y delmundo adulto, particularmente de quienes son autoridades.
Afortunadamente en el país hay iniciativas muy importantes, como las veedurias, las consultas abiertas y referendum, la "adopción" de Congresistas para hacerles no sólo un seguimiento sino aportar a su función de tales. La cultura de las organizaciones de niños y niñas aún debe mirar esta veta como un fecundo espacio de ejercicio de su condición de ciudadanos y ciudadanas y como un aporte a la cultura democrática que no termina de reconocer a las nuevas generaciones como actores en esta tarea y no sólo beneficiarios.

3.- Quizá haya que ir más allá de modificar algunos artículos o añadir algún otro. ¿Por qué no pensar en la posibilidad de repensar un Código o más precisamente, una propuesta de Código que recoja el sentir del amyor número de niños y niñas de país? ¿Por qué no convocar a organizaciones, escuelas, a organizaciones de mujeres, a ONGs que trabajan con infancia, a estudiantes de derecho de nuestras universidades, a profesores y a expertos en leyes e infancia, a la policía, a las DEMUNAs, etc.? ¿Por qué no?.
No nos engañemos, el CNA es poco conocido luego de 16 años de existencia. ¿No sería ésta una inigualable oportunidad para que se conozca y se acepte que los niños y niñas también son ciudadanos que participan, que aprenden y se forman mientras hacen el proceso de hacer sentir su voz calificada?.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
Blog Modificaciones del CNA - Diseñado Por: Abel Daza Monteiro